Blogger versus Webmaster
<<<
Yo no soy un «blogger»,
aunque tenga tres bitácoras.
Aspiro a ser un «webmaster»,
que no es lo mismo.
>>>
<<<
Yo no soy un «blogger»,
aunque tenga tres bitácoras.
Aspiro a ser un «webmaster»,
que no es lo mismo.
>>>
A handy guide for our fellow Europeans,
and others trying to fathom weaselly Brit-speak.
Suggest you have this to hand at the next meeting
[h/t Nicholas Pialek]
«Sadly, I didn’t write it.
It’s just one of those great things
that is being passed around on the internet.»
Duncan Green
From Poverty to Power
>>>
what-brits-say-v-what-they-mean-
>>>
Esta historieta me la ha contado un amigo que ha dado vueltas por medio mundo.
Este es uno que se muere. Como ha sido bueno, llega al cielo y San Pedro le dice que puede escoger si quiere pasar la eternidad en el paraíso o en el infierno. Cuando pregunta cómo son, le contesta que puede probar los dos sitios. De manera que está quince días en el cielo con Jesús, que lo lleva de paseo en su Mercedes blanco, a comer en buenos restaurantes, todo muy bien y muy tranquilo… Luego se va otros quince días al infierno. Lucifer lo lleva en su Ferrari rojo a todos los cabarets y a los sitios de mala vida, a bailar, a beber, a etcétera… […]
The Haka – New Zealand Vs Tonga
>>>
http://libreapopa.blogspot.com.es/2013/11/
<<<
Excerpted from «The Conservative Tradition in European Thought»
Copyright 1970 by Educational Resources Corporation
<<<
Aquí llegamos al aspecto formal del Estado -la cuestión de monarquía frente a república- que se discute mayormente desde puntos de vista muy emocionales, y no racionales. El debate se hace con argumentos ad hominem. Los republicanos enumeran unos cuantos ocupantes indignos de tronos reales, y los presentan como ejemplos de la monarquía en abstracto. Los defensores de la monarquía no son mejores. Apuntan algunos políticos profesionales corruptos, que los hay en suficiente cantidad, y deducen que son la consecuencia necesaria de una constitución republicana. Ninguno de los dos argumentos es racional. Ha habido monarquías buenas y malas, repúblicas buenas (como Suiza), y otras que están a niveles muy inferiores. […]