<<<

Hoy, si le parece bien, podemos seguir hablando

de la gestión de la vialidad en Eivissa.

Hemos visto algo de lo que pasa a Vila y Sant Josep.

Hoy toca seguir nuestro pequeño periplo insular…

<<<

La máxima prioridad a Sant Antoni es

la carretera que comunica los hoteles

con el puerto de Vila, por donde llegan los suministros,

y con el aeropuerto de Es Codolar, por donde llegan los clientes.

Algún día sabremos lo que ha costado hacer y financiar las obras de «mejora».

Se supone que la cosa iba a ser un «desdoblamiento»,

pero alguien hizo planes para convertir dicha carretera en una autopista

que iba a llegar hasta un puerto industrial nuevo en la zona des Caló des Moro.

Por eso hay un carril para vehículos lentos en la cuesta que sube hacia Can Coix.

También estaba prevista una zona logística nueva.

Por eso hay un cambio de sentido en mitad del campo,

a cuatro pasos de la rotonda de Sa Casilla.

Por fin, la cosa ha resultado ser el aborto de una autovía

que seguiremos pagando por los siglos de los siglos.

<<<

El proceso ha conllevado la destrucción de Sant Rafel de Forca,

que ahora es un gran aparcamiento

en cuyo centro hay un nudo de carreteras

que llevan… a otras carreteras, naturalmente.

<<<

En el casco urbano de Sant Antoni de Portmany

la primera prioridad es… lo adivinó usted, el aparcamiento.

En buena parte de las vías públicas hay un solo carril central de circulación

y dos para que los coches estén quietecitos, uno a cada lado.

Pero hay otra:

circular a pie por el centro del pueblo sin morir atropellado/a

cuando uno/a ha consumido una cantidad excesiva de alcohol u otros tóxicos.

Como resultan ser contradictorias, en el centro

los peatones comparten pavimentos únicos con los vehículos

y en el resto del casco urbano

caminan como pueden por unas aceras muy estrechas.

<<<

El resultado más grave de esa tensión entre conceptos opuestos

es el aparcamiento subterráneo de la plaza de España.

Por la propia naturaleza de las cosas,

resulta ser un punto ideal para hacer un intercambiador de transporte.

Hubiera servido muy bien

como punto de parada de un tranvía.

Ahora mismo, no se puede pasar en autobús por la calle General Balanzat

porque hace falta «calmar» el tráfico en todo el West End

y, al mismo tiempo, admitir tantos automóviles privados como sea posible…

Mientras tanto, los usuarios del transporte colectivo

tienen que cruzar a pie todo el pueblo para ir a cualquier sitio

porque los autobuses los dejan en una esquina del mapa.

<<<

Como he dicho en otras ocasiones,

no me hace feliz la política de movilidad

del Ayuntamiento de Sant Antoni.

Pero ya es mucho que exista:

si los gestores ven que hay un problema,

o un conjunto de problemas que en realidad se reducen a uno,

deviene posible hacer un diagnóstico y proponer una terapia.

<<<

Otro día, si usted quiere, podemos seguir el ejercicio

en el Ayuntamiento de Sant Joan.

>>>