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Muchos de nosotros pertenecemos a la grey católica,
somos de la iglesia católica,
pero debe haber entre ustedes por ahí algún adventista,
que también es iglesia, la iglesia adventista,
o luterano, también es iglesia, la iglesia luterana,
o la iglesia anglicana, eeeh…
Está la iglesia pentecostal…
distintas iglesias de origen cristiano.
Pero después están… las sectas que no tienen iglesia,
también cristianos, o no,
pero la mayoría cristiana,
sin iglesia pero con pastores estrella.
No hablo de los de acá, hablo de los de…
incluso los norteamericanos
son los que empezaron a imponer esto.
Juntan gente en los estadios,
transmiten por cadenas de televisión,
lo que llaman la iglesia electrónica,
aprovechan más la televisión
y hacen un «show» de fe que la gente compra.
Y muchos de ésos son bienintencionados
y aprovechan bien la electrónica,
pero no todos son bienintencionados.
Y hay algunos fanáticos,
y los fanatismos siempre son peligrosos.
Las pruebas las tienen con aquellos que murieron envenenados
porque el pastor les dijo que era el momento de morir,
y Dios no manda esas cosas.
O los otros que murieron quemados ahí en…
en uno de los estados de Estados Unidos
porque no se quisieron entregar,
pero estaban armados hasta los dientes…
Cristianos y armados hasta los dientes,
y ahí es dudosa la secta.
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Y uno de éstos teníamos nosotros en el pago,
ahí entre Chaco y Corrientes.
Vamos a ponerle que se llamaba el pastor Jacinto,
pa’ no ponerle nombre…
Él decía que era Jesús…
que era la encarnación de Jesús,
y los seguidores de él encantados.
Peinado así al medio, como Jesús,
en sandalias andaba,
unas túnicas…
Y pa’ reconfirmar esta filosofía
de que él era la reencarnación de Jesús,
armó doce apóstoles que andaban con él pa’ todos lados,
y los que hacían de apóstoles encantados
porque eran despegados del resto.
Eran «los apóstoles»…
.
Y se les complicó la vida
cuando éste les vino con la novedad
que viene Semana Santa
y llegó el tiempo en que me tienen que matar
pa’ cumplir con la profecía, así que…
vienen revirados del mate…
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Y ahí se les complicó la cosa a los apóstoles,
porque hasta ahí venía bien,
porque era como un privilegio que tenían,
pero ya puestos a… a matarlo…
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– Pero viste éste que quiere que le matemos…
Y le vamos a tener que matar porque él dice que es Jesús
pa’ cumplir con la profecía…
.
Y el otro ya le dice…
– Pero él dice que es Jesús…
– ¿Y nosotros no le seguimos porque creemos en él?
– Sí, bueno, pero una cosa es que le sigamos pa’ rezar,
pero otra pa’ matarle, ya es otra cosa…
Cómo le vamos a matar, che amigo… No, no…
– Pero que le tenemos que matar si él pide, que él pide…
No es que nosotros le queremos matar, él quiere que le matemos…
Y además es pa’ cumplir con la profecía, porque él dice que es Jesús,
y tiene que ser en Semana Santa y ya viene Semana Santa…
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Y que sí y que no y unas discusiones bárbaras…
Hasta que uno hizo una proposición un poco más…
más concreta y más cuerda, dice…
– Che, ¿y por qué no vamos a hablar con el comisario?
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Y le fueron a hablar con el comisario…
comisario – comisario de campaña el tipo, viste…
.
– Nosotros somos los seguidores ahí de…
somos del pastor Jacinto,
ahí del templo, que él dice que es Jesús…
– Escuché hablar de él, sí… ¿Y?
– Y usted sabe que él dice que es Jesús
y que ahora viene Semana Santa
y él quiere que le matemos, dice…
– ¿Cómo?
Dice…
– Él quiere que le matemos,
y por eso le vinimos a preguntar a usted…
– Y métanle…
– Le ma…
– Sííííí…
– ¿Usted dice que le matemos?
– Sí, mátenlo…
– ¿Le matamos nomás?
– Sí… Eso sí, si al tercer día no resucita van en cana todos, ¿eh?…
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Venga… y le Cuento…
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