<<<
Diario de Ibiza, 18 de agosto de 2011
Como cada inicio de legislatura, desde hace 11 años, se nos presenta una nueva oportunidad para reconducir el presente y el futuro del Consorcio Ibiza Patrimonio de la Humanidad. Deben, los que han sido ungidos con los poderes pertinentes, elegir entre seguir una línea continuista con los gestores anteriores, o tomar decisiones que si bien pueden parecer en un primer momento impopulares, son indispensables para el futuro de la entidad.
Si se opta por el continuismo, sobran las palabras… y que Dios reparta suerte.
Si optamos por ser valientes (y por qué no, responsables, serios, etc.), tenemos varias prioridades:
1º) El Consorcio debe ser reformado en profundidad.
Sus estatutos están caducos y deben reflejar de manera clara y sin ambages uno de los preceptos fundamentales: la participación ciudadana. Debe convertirse en una entidad abierta, viva y participativa; no puede seguir siendo el juguete de los gobernantes de turno, la caja de caudales en la que se mete la mano cada vez que nos quedamos sin financiación para otros menesteres que nada tienen que ver con sus objetivos.
2º) Tempus fugit.
Tenemos que entregar antes de febrero del próximo año un plan de gestión de los bienes incluidos en la declaración de Patrimonio de la Humanidad. Es posible que ya se esté trabajando en su redacción, pero en un secretismo absoluto, y además cualquier plan de gestión debe llevar implícita la participación ciudadana (no se lo inventa este servidor, Unesco dixit).
3º) Definición de sus objetivos.
En estos momentos el Consorcio financia con siete millones de euros (1.164 millones de las antiguas pesetas, para los nostálgicos) la reforma de Vara de Rey, y la unidad de actuación 27 en Sa Penya… Mientras tanto somos testigos de la destrucción sistemática de las praderas de posidonia oceánica.
En fin, mucha suerte a todos.
<<<
Juan Pacheco Tirado
https://juanpacheco-ibiza.com/
Dalt Vila…
Eivissa – Ibiza…
Vila…
>>>