Imagen de portada:  Discovery One 

http://www.valenciaplaza.com/ver/153355/curiosidades-2001-reestreno-jueves.html

<<<

Ultima Hora,  FDS,  23 de noviembre de 2001

En mi opinión, es mejor leer los libros de los que sacan «adaptaciones» cinematográficas antes de ver las películas. En muchos casos, es «en vez de» verlas. Hay excepciones; por ejemplo, «2001».

Ello se debe a que ambos autores escribieron el guión de la película y el libro al mismo tiempo. De forma que el uno es obra de Kubrick y Clarke y el otro de Clarke y Kubrick. La película, como los buenos vinos, ha mejorado con los años. Sigue siendo una experiencia audiovisual fastuosa. Es una obra abierta a la libertad del espectador. Cada uno saca sus propias interpretaciones, porque emplea un lenguaje de símbolos. Menos de la mitad de la cinta tiene algún tipo de diálogo. Que consiste mayormente en trivialidades cotidianas. Pero ya dijo Clarke que «Si usted entiende 2001 por completo, hemos fracasado. Queremos suscitar más preguntas de las que contestamos».

El libro es mucho más, digamos, concreto. El «leit-motiv» ya está de alguna manera en «The Sentinel» y en «Childhood’s End». Que tampoco hay que leer antes de ver la película. En mi opinión, cuando Clarke escribe la novela está cerrando el abanico de las interpretaciones y proponiendo la suya. Tiene derecho a publicarla, sin duda es la más autorizada, y encima explica cabalmente todos los enigmas de la película. Precisamente por eso es mejor verla y pasarse una temporada cavilando sobre el qué y el cómo de todo ello. Luego lee usted el libro y todo cuadra; hasta demasiado, quizá.

Le digo esto por experiencia. Por razones que no hacen al caso, no tuve oportunidad de verla en la época del estreno. Más tarde descubrí los libros de Clarke y empecé a leerlos y releerlos, incluyendo «2001». Tenía perfectamente clara la filosofía, la temática, y hasta la estética, porque había oído la banda sonora montones de veces.

De manera que me sentía muy tranquilo y muy seguro cuando me presenté en un cine a verla por primera vez. A mí no me iban a tomar el pelo, porque ya estaba en el ajo y en la cebolla. En fin…

Empezó la película, sonó el «Also sprach Zarathustra», me enderecé en la butaca y entreabrí la boca. Tres horas después terminó, cerré la boca y salí del cine. Toda mi teoría se había disuelto como un azucarillo lanzado al mar en medio de una tormenta. No sé cómo habría salido sin tanta lectura previa…

Ahora tendría que explicarle por qué me ha marcado tanto la película. Pero resulta muy difícil hablar de unas impresiones que no son verbales; no es algo que me han contado y que puedo repetirle. Por eso me limitaré a reseñar algunas anécdotas y curiosidades. No siga leyendo si no ha visto la película. Por nada del mundo quisiera chafarle la primera vez.

<<<

Lo primero que ve usted mientras suena la música de Strauss es una conjunción planetaria. Es algo que se intuye al instante como único e irrepetible, prescindiendo de que crea usted en la astrología o no, y plantea desde el principio ese ritmo reposado propio de esta película.

«2001» ganó el Oscar a los mejores efectos especiales, por supuesto. En cambio, no tuvo el de maquillaje. Quizá fuera porque los jueces no se habían dado cuenta de que los monos que salen al principio son… actores, naturalmente.

Cuesta bastante darse cuenta de cómo está montado el ordenador en la nave. En realidad es parte indisociable de la «Discovery»: es como su sistema nervioso. Tiene ojos, oídos y bocas por todas partes. Cuando Dave llega por fin a su núcleo para desconectarlo, no nos encontramos con nada ni remotamente parecido a un robot, un androide o un ser humano. El «cerebro» de HAL es como una centralita de teléfonos. Sin embargo, cuando Dave lo desmonta está liquidando al otro ser consciente que aún vive a bordo.

Al parecer, en algunos cines tuvieron problemas porque ciertos espectadores consumían determinadas sustancias para «modificar» su percepción de las escenas del «viaje» de Dave desde la Puerta de las Estrellas. Ahora puede hacer usted algo parecido con un PC y cualquier programa de gráficos. Pero en 1968 no había nada de eso y eran toda una novedad.

Y podría seguir explicando más cosas sobre «2001», pero no sé si le apetece oírlas. A bastantes personas no les gusta, y lo manifiestan con todo tipo de descalificaciones. Pero como dijo Arthur Clarke, «Stanley Kubrick y yo nos vamos riendo todo el camino hasta el banco». Tal vez a usted le interese y tal vez no. Si quiere decirme por qué, me encuentra en…

CONTACTO

<<<

Alejandro Bérgamo Madiedo  –  2001, una Odisea del Espacio

El Imperio contraataca (hablo de «2001»)…

https://2001archive.org

Estación espacial

Dune, de Frank Herbert…

«2001»  en  www.ciencia-ficcion.com…

>>>